Miles de personas se reunieron el martes 14 de noviembre frente al Capitolio de Estados Unidos para mostrar su apoyo a Israel en su lucha contra Hamás. Esta manifestación fue una respuesta a la protesta a favor de Palestina que tuvo lugar el pasado 4 de noviembre.
La multitud gritaba a pleno pulmón frases como «Aquí no nos cubrimos las caras» y «Acabad el trabajo», en referencia a la eliminación completa de Hamás. Esta concentración contó con el apoyo de destacados políticos de ambos partidos, lo que demuestra el apoyo institucional que recibe Israel en Washington.
El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, se dirigió a los manifestantes y les dijo: «Hay pocos temas en Washington que puedan unir tan fácilmente a líderes de ambos partidos en ambas cámaras. La supervivencia de Israel nos une… Las peticiones de un alto al fuego son indignantes».
El líder demócrata en la Cámara, Hakeem Jeffries, también compareció y dijo que «Israel tiene el derecho absoluto de defenderse ante los ataques de Hamás», defendiendo que la campaña militar en curso se asegure de que «el brutal régimen terrorista no pueda volver a levantar cabeza».
Además, el presidente de Israel, Isaac Herzog, se dirigió a los manifestantes a través de una videoconferencia, y el histórico disidente soviético Nathan Sharansky, quien en los años 70 y 80 fue preso por su defensa del pueblo judío bajo el yugo del régimen comunista ruso, dijo: «Ya derrotamos a la Unión Soviética, y haremos lo mismo con estos enemigos».
El senador demócrata John Fetterman también se unió a la manifestación, luciendo una bandera israelí al cuello. Fetterman se ha convertido en uno de los mayores defensores de Israel en esta campaña contra Hamás, a pesar de las críticas de la izquierda de su partido.
La manifestación también fue un repudio al antisemitismo, después de que la Liga Antidifamación registrara un pronunciado aumento tras los recientes ataques de Hamás.
La Casa Blanca se ha negado a pedir un alto el fuego en las hostilidades, y ha acusado a Hamás de guarecerse en centros de población civil y edificios como hospitales. Esto ha provocado que el apoyo a Israel se intensifique en Washington, y que la narrativa se vuelva cada vez más a favor del Estado judío.
Los manifestantes pidieron a los líderes políticos que redoblen su apoyo a Israel y que no se hable de alto el fuego en este momento. Como dijo el diputado demócrata de Nueva York, Ritchie Torres: «Sería como si le hubieran pedido a EE.UU. un alto al fuego con Japón después de los ataques en Pearl Harbor».
La manifestación de apoyo a Israel fue una muestra de la unidad que existe en Washington