El pánico se apoderó este jueves del centro de Dublín (Irlanda) cuando, en las inmediaciones de un colegio, un hombre se abalanzó sobre varios transeúntes para apuñalarlos y dejó un total de cinco heridos, dos de ellos graves, a primera hora de la tarde. La barbarie no terminó con este ataque, sino que el salvajismo se desató en la ciudad por la noche, cuando centenares de personas salieron a manifestarse y decenas de ‘hooligans’ prendieron fuego a varios medios de transporte y destrozaron mobiliario urbano. Tras los disturbios, Dublín se ha despertado este viernes entre escaparates rotos, tiendas saqueadas y coches humeantes.
La Policía atribuyó a agitadores de extrema derecha el inicio de la violencia, después de que un pequeño grupo de manifestantes antiinmigrantes llegara al lugar del apuñalamiento, junto a la calle principal de O’Connell Street, y se enfrentara a los agentes. Los altercados han redundado en la detención, hasta el momento, de 34 personas, que se une a la del autor del apuñalamiento el día anterior. Además, han dejado un policía herido, más allá de los acuchillados unas horas antes.
Noticia Relacionada estandar No Graves incidentes en Dublín tras el apuñalamiento múltiple que dejó tres niños heridos AFP Decenas de personas se han echado a la calle de la capital irlandesa y han prendido fuego a coches, autobuses y mobiliario urbano en protesta Ataque frente a un colegio. Las revueltas registradas a última hora del jueves, las peores de Dublín en años, tuvieron su germen en el ataque con arma blanca perpetrado contra cinco personas por la tarde. Poco después de las dos (hora local), un individuo acuchilló a cinco personas, entre las que se contaban tres menores de corta edad. En la agresión, resultaron heridas de gravedad una mujer en la treintena y una niña de cinco años, mientras que otra menor de seis y un pequeño de cinco también tuvieron que ser trasladados al hospital con pronóstico leve. El atacante, detenido por la Policía, fue la quinta víctima, también con lesiones de consideración. Sobre el arrestado, las autoridades revelaron que se trataba de un hombre de unos 50 años, al que la Policía ya consideraba «una persona de interés», pero no ofrecieron ninguna información sobre su nacionalidad.
Disturbios posteriores Tras el incidente, la Policía explicó que no relacionaba lo ocurrido con un ataque terrorista y que contemplaba cualquier posible móvil. Sin embargo, a lo largo de la tarde se propagó el rumor de que el autor de la agresión era de origen argelino, lo que originó la congregación de centenares de personas contrarias a la inmigración en el mismo lugar de los apuñalamientos. Los asistentes a