Fue asombroso. Una multitud aplaudió y vitoreó al liberal Javier Milei cuando anunció que un ajuste fiscal sin precedentes se implementaría en la Argentina. La mitad de la población depende de la ayuda estatal, y este anuncio significaba que un camino desconocido se abriría. En su primer discurso como presidente, Milei se mostró firme en el anuncio de los planes de ajuste fiscal y recordó a todos que «no hay plata», una frase difícil de escuchar para un público apabullante. Paradójicamente, el público celebró su anuncio. También resaltaron la presencia de líderes extranjeros, incluido el ucraniano.
Milei hizo un llamado a la unidad y a la responsabilidad, y apeló a la esperanza y al emprendimiento cívico. Aseguró que el ajuste fiscal ayudaría a fortalecer la economía, destacando el enorme potencial de la Argentina para ser una de las principales economías del mundo. Pidió a los argentinos que se comprometieran a trabajar juntos para lograr una economía sólida y una sociedad más justa para todos.
Milei también prometió atacar el problema de la inflación y garantizar la seguridad económica de los argentinos, sin sacrificar su calidad de vida. Añadió que, a pesar de los recortes necesarios para equilibrar el presupuesto, los argentinos recibirían ayuda financiera para superar la recesión.
La respuesta del público a la oferta de Milei fue muy positiva. Los argentinos mostraron su apoyo a la nueva administración con ovaciones y aplausos. Esta muestra de apoyo ilustra el optimismo de la nación y su deseo de tener éxito en esta nueva etapa de su economía. La Argentina está preparada para dar el salto y aceptar los retos que conlleva un ajuste fiscal para construir un futuro más prometedor.
Milei concluyó su discurso con una llamada a la perseverancia y al esfuerzo común. «Sin duda, será difícil, pero juntos, lo lograremos», dijo. El público respondió a su llamado con un estruendoso aplauso y quedó claro que el presidente Milei estableció una conexión con los argentinos. Él inspiró una sensación de esperanza en la nación de que la economía mejorará, y los argentinos se unieron para abrazar esta nueva era de cambios.