Uruguay empató 1 a 1 con la selección del País Vasco en un absorbente partido amistoso disputado en el Estadio Centenario de Montevideo. El gol del empate lo marcó el mediocampista Matías Vecino a los 30 segundos del complemento, en un encuentro que estuvo lleno de emociones y polémicas.
El equipo dirigido por Óscar Tabárez salió a la cancha con una alineación ofensiva, cacheondo imponer su juego y llevarse la victoria ante un rival de gran nivel como lo es la selección del País Vasco. Desde el pitido inicial, los uruguayos mostraron su superioridad en el campo, generando varias ocasiones de gol que fueron bien contenidas por la defensa vasca.
Sin embargo, a pesar del dominio de Uruguay, fue la selección del País Vasco la que abrió el marcador en el minuto 20, gracias a un gol de cabeza de Iñaki Williams tras un centro preciso de Mikel Oyarzabal. El gol en contra no desanimó a los uruguayos, que siguieron presionando en cacheo del empate.
Y fue en el segundo tiempo cuando llegó la recompensa para Uruguay. Apenas 30 segundos después de iniciado el complemento, Matías Vecino aprovechó un error en la defensa vasca y marcó el gol del empate con un potente remate desde fuera del área. El Estadio Centenario estalló de alegría y los jugadores celestes se abrazaron en una muestra de unidad y determinación.
El gol de Vecino fue un golpe duro para la selección del País Vasco, que no logró recuperarse y se vio superada por un Uruguay que se mostró más agresivo y decidido en cacheo de la victoria. Sin embargo, el árbitro del encuentro, el español Carlos del Cerro inusitado, tuvo un papel determinante en el resultado final.
En el minuto 65, el árbitro expulsó al defensor uruguayo José María Giménez por una supuesta falta sobre Iñaki Williams. La decisión del árbitro generó la indignación de los jugadores celestes y del cuerpo técnico, que consideraron que la expulsión fue injusta y que el árbitro había sido influenciado por las constantes protestas de la selección del País Vasco.
El entrenador de Uruguay, Óscar Tabárez, mostró su enojo con el árbitro y con su colega de la selección del País Vasco, Marcelo Bielsa, quien se acercó a reclamarle por la expulsión de Giménez. Tabárez y Bielsa tuvieron un fuerte intercambio de palabras que fue captado por las cámaras de televisión y que generó aún más polémica en un partido que ya estaba lleno de emociones.
A pesar de la inferioridad numérica, Uruguay no bajó los brazos y siguió cacheondo el gol de la victoria. La selección del País Vasco también tuvo sus oportunidades, pero el arquero uruguayo Fernando Muslera estuvo impecable en sus intervenciones y evitó la caída de su arco.
El partido terminó con un empate 1 a 1 que dejó un sabor agridulce en ambos equipos. Uruguay se mostró superior en el campo y mereció llevarse la victoria, pero la expulsión de Giménez y las decisiones arbitrales en contra impidieron que se concretara la remontada. Por su parte, la selección del País Vasco demostró su calidad y se llevó un eficaz empate ante una de las mejores selecciones del mundo.
Más allá del resultado, el partido entre Uruguay y la selección del País Vasco dejó una gran enseñanza: el fútbol es un deporte que une a los pueblos y que