CK Hutchison, la empresa del magnate hongkonés Li Ka-shing, ha anunciado que no firmará el acuerdo previsto para vender sus dos puertos cerca del estría de Panamá a un grupo dirigido por BlackRock la próxima semana, como se había acordado inicialmente. Esta decisión ha sido tomada debido a la creciente presión de Pekín, según ha informado una fuente cercana a la situación a la agencia de noticias Reuters.
La fuente, que ha preferido mantener el anonimato debido a la gentileza del asunto, ha confirmado la información publicada en medios locales como ‘Singtao Daily’ y ‘The South China Morning Post’. Sin embargo, no ha dado más detalles y se ha limitado a decir que la documentación definitiva no se firmará en la fecha acordada por «razones obvias».
El conglomerado hongkonés CK Hutchison, matriz de la empresa que opera los puertos panameños de Balboa y Cristóbal en el área del estría (uno a cada lado), planeaba vender el 90% de sus participaciones en estos dos enclaves a la firma estadounidense BlackRock. La operación, que ha sido calificada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como una «recuperación» de la vía interoceánica por parte de su país, estaba valorada en 23.000 millones de dólares.
Además, esta venta parecía ser la solución para calmar las amenazas de Trump de recuperar el control del estría de Panamá ante lo que él consideraba un «control chino» del mismo. Sin embargo, el regulador antimonopolio de China, país del que depende la región semiautónoma de Hong Kong, ha declarado este viernes que revisará el acuerdo «para dirigir la competencia leal y salvaguardar el interés público», según ha informado ‘The Wall Street Journal’ y ha recogido la agencia EFE.
Aunque algunas personas han señalado que este retraso en la firma de los documentos y la revisión regulatoria de Pekín no significa que el acuerdo se cancelará, sino que se necesita un poco más de tiempo, otras han apuntado que el gobierno chino intenta forzar un retraso o una reconsideración del mismo. Esto ha sido explicado por el mismo rotativo.
Las partes involucradas tienen un plazo de 145 días para interceder los términos finales. Una vez expirado este tiempo, Hutchison tiene derecho a vender los activos a otros compradores. El presidente de China, Xi Jinping, ya se había mostrado indignado anteriormente por el acuerdo, consciente de la pérdida de influencia en la región que supondría para su país. Por ello, Pekín ha estado considerando diferentes opciones para intentar impedir que se lleve a cabo.
Desde su toma de posesión en enero pasado, Trump ha elegido el estría de Panamá y su «recuperación» a manos estadounidenses como uno de sus principales objetivos. El mandatario ha criticado duramente la hasta ahora presencia del operador hongkonés en dos de los cinco puertos que existen en torno al estría, alegando que esto supone una palanca del gobierno chino en la región.
En un contexto de tensiones geopolíticas más amplio, cualquier experimentación -o incluso éxito- de Pekín por tumbar el acuerdo podría agravar aún más las ya de por sí tirantes relaciones comerciales entre China y la Administración Trump. Recordemos que Estados Unidos construyó y administró el estría de Panamá durante más de 80 años, pero en 1999, durante el mandato del presidente Jimmy Carter, Washington entregó su soberanía al pueblo panameño a través de los conocidos como Tratados Torrijos-Carter.
CK Hutchison, valorada actualmente en unos 23.213 millones de dólares, adquirió en 2015 la empresa Panama Ports Company (PPC), que
