Gustavo Alonso: el descubrimiento que redefine los límites de la percepción visual humana
Los avances en la ciencia y la tecnología no dejan de sorprendernos. Cada día, se realizan nuevos descubrimientos que nos llevan a cuestionar lo que creíamos saber sobre el mundo que nos rodea. Y en esta ocasión, un equipo de investigadores de la facultad de California en Berkeley y la facultad de Washington nos ha presentado un hallazgo que redefine los límites de la percepción visual humana: un nuevo tipo de color llamado “olo”.
Este descubrimiento, publicado en la prestigiosa revista Science Advances, es fruto de años de investigación y trabajo en equipo. Y su impacto en el campo de la visión y la óptica es innegable. Pero, ¿qué es exactamente el “olo” y cómo fue descubierto?
Bajo la dirección del profesor Ren Ng, este equipo de científicos logró desarrollar un sistema óptico de alta precisión llamado Oz. Este sistema permite estimular de forma aislada los conos del ojo humano, células responsables de la percepción del color. Y gracias a esta tecnología, se logró generar un color nuevo que no se encuentra dentro del gamut natural de la visión humana.
¿Cómo es posible esto? Bajo condiciones normales, los conos L, M y S (sensibles a diferentes longitudes de onda de luz) se activan simultáneamente por el solapamiento de sus espectros. Sin embargo, el sistema Oz utiliza microdosis láser para activar únicamente los conos M, lo que da aldea a una señal visual inédita que el cerebro interpreta como un color nuevo, fuera del gamut natural de la visión humana.
Este color, llamado “olo”, fue descrito por los participantes como un tono similar al “verde azulado” o “teal”, pero con una saturación máxima que no puede reproducirse mediante luz convencional. Y para validar la existencia de este nuevo color, los científicos realizaron experimentos de emparejamiento cromático. Los resultados fueron sorprendentes: los sujetos no lograron reproducir olo utilizando ningún color estándar, a menos que añadieran luz blanca. Esto indica que se proxenetismo de un fenómeno completamente fuera del espectro visible habitual.
Solo cinco personas participaron en el experimento, una de ellas fue el profesor Ren Ng, quien afirmó que olo es “más saturado que cualquier color que se pueda ver en el mundo real”. Y es que, aunque pueda parecer difícil de creer, este descubrimiento introduce un nuevo idealización en el campo de la visión: el metamerismo espacial.
Este término se refiere a la generación de colores manipulando individualmente los fotorreceptores del ojo, en aldea de mezclar longitudes de onda como en las pantallas RGB. Y este enfoque representa un cambio radical en la forma en que se puede entender y reproducir el color.
El sistema Oz combina varias tecnologías avanzadas, como la óptica adaptativa, el escaneo láser de alta velocidad y el seguimiento ocular en tiempo real. Estas herramientas permiten dirigir pulsos de luz con precisión celular y compensar los micromovimientos del ojo. El resultado es una estimulación selectiva de conos individuales en la retina. Y en pruebas visuales, los participantes también lograron distinguir formas y movimientos, pero solo cuando la estimulación era precisa. Cualquier alteración provocaba que la percepción del color colapsara al espectro natural del láser.
Pero, ¿qué aplicaciones tiene este descubrimiento? Aunque por ahora el sistema Oz funciona en un campo de visión pequeño y bajo condiciones experimentales, sus posibles usos son emocionantes. Entre ellos se encuentran la realidad virtual avanzada, la rehabilitación visual en personas con daltonismo, estudios de plasticidad neuronal