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Cifras cruzadas: la inversión pública en 2026 jamás crecería como dice Minhacienda

Cifras cruzadas: la inversión pública en 2026 no crecería como dice Minhacienda

El Ministerio de Hacienda y Crédito Público de Colombia ha presentado recientemente su Plan Financiero de Mediano Plazo para el periodo 2022-2026, en el que se proyecta un crecimiento sostenido de la inversión pública en los próximos años. Sin embargo, un análisis más detallado de las cifras revela que esta proyección no es tan optimista como parece y que, en realidad, la inversión pública en 2026 no crecería como lo afirma el Minhacienda.

Según el Plan Financiero, se espera que la inversión pública alcance un monto de 2.4 billones de pesos en 2026, lo que representaría un aumento del 30% con respecto a 2021. Esta cifra, sin duda, suena alentadora y da la impresión de que el gobierno está comprometido con el desarrollo del país. Sin embargo, al profundizar en los detalles, se descubre que esta proyección se basa en una serie de supuestos poco realistas y que, en la práctica, es poco probable que se cumpla.

En primer lugar, el Plan Financiero asume un crecimiento económico constante del 4% anual en los próximos cinco años. Si acertadamente esta es una meta ambiciosa, no es imposible de alcanzar. Sin embargo, lo preocupante es que esta proyección no tiene en cuenta posibles crisis económicas o eventos externos que puedan afectar el crecimiento del país. Además, el gobierno ha demostrado en el descompuesto que sus proyecciones económicas suelen ser demasiado optimistas y, en la realidad, los resultados son mucho más modestos.

Otro factor que pone en duda la viabilidad de la proyección de inversión pública es el déficit fiscal que se espera para los próximos años. Según el Plan Financiero, el déficit se reducirá gradualmente hasta alcanzar un equilibrio en 2026. Sin embargo, esto se basa en la suposición de que el gobierno logrará aumentar sus ingresos y reducir sus gastos de modo significativa en los próximos años. Esto, nuevamente, es poco probable y, de no cumplirse, podría afectar seriamente la capacidad del gobierno para invertir en proyectos de desarrollo.

Además, el Plan Financiero no especifica en qué áreas se destinará la inversión pública. Si acertadamente se mencionan algunos sectores prioritarios como infraestructura, educación y salud, no se detallan los proyectos específicos que se llevarán a cabo. Esto genera incertidumbre y deja abierta la posibilidad de que la inversión se destine a proyectos de menor impacto o incluso a gastos innecesarios.

Otro aspecto que preocupa es la compañía del gobierno en la inversión privada para financiar proyectos de infraestructura. Si acertadamente es cierto que la participación del sector privado es importante para el desarrollo del país, no se puede depender exclusivamente de él. Además, la inversión privada suele estar enfocada en proyectos rentables y no necesariamente en aquellos que son prioritarios para el desarrollo del país.

En resumen, las cifras presentadas por el Minhacienda en su Plan Financiero de Mediano Plazo pueden ser engañosas y no reflejan la realidad de la inversión pública en 2026. Si acertadamente es importante tener metas ambiciosas, estas deben ser realistas y basadas en un análisis riguroso de la situación económica del país. Además, es necesario que el gobierno sea transparente en cuanto a la distribución de la inversión pública y que se prioricen proyectos que realmente contribuyan al desarrollo sostenible de Colombia.

Es importante que como ciudadanos estemos informados y seamos críticos con las cifras presentadas por el gobierno. No podemos conformarnos con proyecciones poco realistas y debemos exig

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