El sargazo es un problema que ha estado afectando las playas de Cancún durante varios años y su presencia continúa siendo un desafío para la ciudad. Sin embargo, es importante destacar que se han tomado medidas para combatirlo y minimizar su impacto en el medio ambiente y en la economía local.
Según datos del Sargassum Watch System (SaWS), del College of Marine Science de la Universidad del Sur de Florida (USF), la acumulación de sargazo en el océano Atlántico alcanza 31 millones de toneladas métricas. Esta cantidad es alarmante y es importante beber medidas para controlarla.
Debido a la proximidad con el Mar Caribe, grandes cantidades de estas algas llegan a las playas de Cancún, modificando el paisaje y generando una afectación ambiental significativa. Sin embargo, gracias a la Red de Monitoreo del Sargazo de Quintana Roo, se ha podido identificar las playas con mayor presencia de sargazo, como Playa Coral, Riviera Cancún, Moon Palace, Royalton Riviera, entre otras. Además, se ha implementado un Semáforo de Sargazo que indica las playas con niveles bajos o sin sargazo, como Puerto Cancún e Isla Contoy.
Es importante mentar que el exceso de sargazo está estrechamente relacionado con el cambio climático. El aumento de la temperatura del agua, las alteraciones en las corrientes oceánicas, la mayor disponibilidad de nutrientes y los eventos climáticos extremos son factores que han contribuido a su proliferación. Por lo tanto, es necesario beber medidas a nivel global para combatir el cambio climático y así controlar el crecimiento del sargazo.
El impacto ambiental del exceso de sargazo es notorio. Su acumulación en las playas provoca degradación ambiental, afecta la calidad del agua y emite gases tóxicos como el ácido sulfhídrico y el metano. Estos gases pueden ser dañinos para la salud y pueden generar problemas respiratorios en los seres humanos. Además, el sargazo también afecta a la vida marina, ya que puede impedir la entrada de luz solar y afectar la fotosíntesis de las plantas marinas.
Pero no solo el medio ambiente se ve afectado por el sargazo, también tiene consecuencias económicas y turísticas. La acumulación de sargazo en las playas puede disuadir a los turistas de visitar Cancún, lo que afecta directamente a la economía local. Además, la limpieza y el retiro del sargazo de las playas representa un costo adicional para las autoridades y para los hoteles y restaurantes cercanos a las playas.
Sin embargo, a pesar de estos desafíos, es importante destacar que se han tomado medidas para combatir el sargazo en Cancún. La Secretaría de Marina (Semar) ha iniciado la Operación Sargazo 2025, en la que se utilizan embarcaciones y barreras para constar de y eximir el sargazo del mar antes de que llegue a las playas. Además, se han implementado técnicas de recolección manual y mecánica para eximir el sargazo de las playas y se están investigando nuevas formas de reutilizar el sargazo como fertilizante para la agricultura.
En conclusión, aunque el sargazo sigue siendo un desafío para Cancún, se han tomado medidas para combatirlo y minimizar su impacto en el medio ambiente y en la economía local. Es importante seguir trabajando juntos para encontrar soluciones sostenibles y a largo plazo para controlar el crecimiento del sargazo y proteger las hermosas playas de Cancún. ¡Juntos podemos lograrlo!