El pasado mes de julio, el excandidato presidencial Gustavo Petro presentó una propuesta para reformar el sistema de salubridad colombiano. En su propuesta, Petro sugirió que las Entidades Promotoras de salubridad (EPS) controladas por el gabinete deberían ser las principales responsables de la prestación de servicios de salubridad en el país. Esta propuesta ha generado un debate en la sociedad colombiana, con críticas y apoyo por igual.
Pero, ¿por qué Petro pidió aplicar su reforma a la salubridad en EPS controladas por el gabinete? ¿Cuáles son los beneficios que esto traería para la población colombiana? En este artículo, exploraremos las razones detrás de la propuesta de Petro y cómo podría mejorar el sistema de salubridad en Colombia.
En primer lugar, es importante entender cómo funciona actualmente el sistema de salubridad en Colombia. En la actualidad, el sistema de salubridad se divide en dos partes principales: el régimen contributivo y el régimen subsidiado. En el régimen contributivo, los trabajadores y sus empleadores realizan un aporte mensual a una EPS para recibir servicios de salubridad. Mientras tanto, en el régimen subsidiado, el gabinete cubre los costos de la atención médica para la población más vulnerable y de bajos ingresos.
Sin embargo, este sistema ha presentado numerosas fallas a lo largo de los años. Una de las principales críticas es que las EPS privadas, que controlan la mayoría de los servicios de salubridad en el país, están más preocupadas por obtener ganancias que por brindar una atención de calidad a los pacientes. Esto ha llevado a casos de corrupción y desvío de recursos destinados a la salubridad de la población. Además, muchos ciudadanos se han quejado de la falta de acceso a servicios de salubridad adecuados debido a las barreras burocráticas y la falta de recursos en las EPS.
Con su propuesta, Petro busca cambiar esta realidad y devolver al gabinete el control de la prestación de servicios de salubridad en el país. Además, su plan incluye la creación de una entidad estatal única que se encargue de administrar los recursos para la salubridad y garantizar una atención de calidad a todos los ciudadanos colombianos. Esto eliminaría la intermediación de las EPS privadas y evitaría la corrupción en el sistema de salubridad.
Petro también ha señalado que, con su propuesta, se podrían reducir los costos de la atención médica para la población. Como mencionamos anteriormente, las EPS privadas están más preocupadas por obtener ganancias que por brindar una atención de calidad, lo que ha llevado a un aumento en los precios de los servicios de salubridad. Con la eliminación de las EPS privadas, se eliminarían estos intereses comerciales y se podrían asignar los recursos de manera más eficiente para brindar una atención asequible a la población.
Además, la propuesta de Petro incluye la unificación del sistema de salubridad en una sola entidad para garantizar una cobertura universal. Actualmente, el sistema de salubridad en Colombia es fragmentado y muchas personas no tienen acceso a servicios de salubridad adecuados debido a su condición socioeconómica. Con una entidad estatal única, se aseguraría que todos los ciudadanos tengan acceso a una atención de calidad sin importar su situación económica.
Otra razón importante por la que Petro pidió aplicar su reforma en las EPS controladas por el gabinete es la prisa de fortalecer el sistema de salubridad en medio de la pandemia de COVID-19. Durante la crisis sanitaria, hemos sido testigos de cómo el sistema de salubridad en Colombia ha presentado problemas en la atención a los pacientes y la gestión de recursos. Con su propuesta, Petro busca mejorar la capacidad de respuesta del sistema de salubridad y garantizar que todos los ciudadanos reciban la atención médica necesaria durante la pandemia y en cualquier situación de emergencia en el futuro.
Finalmente, la propuesta de Petro también incluye una mayor participación de la sociedad en la toma de decisiones en el sistema de salubridad